Han llegado a la Reserva Ornitológica de SEO/BirdLife de O Grove tres flamencos comunes, esas aves de apariencia exótica, muy esbeltas y de color rosa.
• Recordemos que los flamencos comunes (Phoenicopterus roseus), son aves muy altas, de tonos rosa suave (“roseus”), e intensos púrpura en coberteras e infracoberteras alares (“Phoenicopterus” significa “púrpura” y “ala”). Las patas rosas son largas, cuello larguísimo muy flexible, pico rosado extraño y curvado hacia abajo (de plátano), con punta negra, y ojos amarillos. Las hembras son más pequeñas, los jóvenes pardo grisáceos y los inmaduros de tonos grises y blancos. En vuelo son muy estilizados, llevando cuello y patas estirados, apreciándose las alas negras y fucsia. Vuelan rápido y directo formando grupos irregulares o largas filas. Caminan lentamente por el cieno y no se hunden por sus dedos unidos por membranas, que a su vez les facilitan nadar con destreza. Muy sociables, viven en grandes bandadas.
• La palabra “flamenco” relacionada con las aves y que aparece en muchos idiomas tiene distintas significaciones: una dice que proviene de “flama de fuego” por su plumaje que recuerda a las “llamas”. Otra apunta a que en el siglo XII se le dio en francés el nombre de “flamenque” por ser sonrosados como la piel de los habitantes de Flandes, y otras, poco probables dicen que flamenco es porque “zapatean” como lo hacen los bailaores de flamenco e incluso que estos son esbeltos como las aves.
• Con sus patas y cuellos extraordinarios exploran aguas más profundas donde otras aves no llegan. El pico adaptado para hurgar en el barro, tiene laminillas que retienen las sustancias nutritivas al filtrar el agua. Para alimentarse colocan su cabeza entre las patas y “zapatean” el fondo, removiendo la materia orgánica: pequeños moluscos, crustáceos, larvas, insectos, semillas y algas, de donde proceden los pigmentos carotinoides que le dan los tonos rojizos, importantes en el período reproductor.
• Frecuentan aguas someras y despejadas, salobres o saladas: lagunas, marismas, bahías y salinas. Se reproducen en humedales de aguas superficiales de nivel constante.
• Desde abril nidifican en apretadas y ruidosas colonias. Los nidos muy próximos entre sí, son conos altos de barro. Tienen uno o dos polluelos con plumón gris, que pronto abandonan el nido y quedan al cargo de varios adultos en “guarderías”.
• Se extienden mayoritariamente y de forma discontinua por Europa mediterránea, África del norte, occidental, oriental y austral, además desde el suroeste de Asia hasta la India, dependiendo de la disponibilidad de hábitats favorables.
• En España es un ave parcialmente migradora, dispersiva y nómada que ocupa en invierno marismas del Guadalquivir y Odiel, bahía de Cádiz, algunos puntos del litoral mediterráneo, lagunas interiores de Andalucía, Castilla-La Mancha y Baleares. Es ocasional en Extremadura. Se reproducen en costas Mediterráneas, suroeste Atlántico, marismas del Guadalquivir, interior de Andalucía y Castilla-La Mancha.
• Tras la cría los flamencos se reparten por distintos humedales ibéricos y humedales del norte de África y del Mediterráneo oriental, y algunos pueden llegar a Galicia como divagantes muy raros.
• Este otoño a nuestra comunidad han llegado 6 flamencos a la laguna de Louro, en Muros, más los tres flamencos juveniles que se mueven por la ensenada de O Vao. No se habían vuelto a ver flamencos en este espacio desde 2015/2016 cuando el joven, “Mingos”, pasó todo el invierno en la reserva.
Ojalá que estos 3 flamencos aguanten un tiempo en nuestra comarca para poder gozar de su presencia, luego igual que hizo “Mingos”, deseamos que vuelvan a su área habitual de distribución.
Enviada en 17/10/2022